China anunció esta semana la puesta en servicio del portaaviones Fujian durante una ceremonia realizada en la base naval de Sanya, con la presencia del presidente Xi Jinping. La incorporación del buque representa un hito para la Armada del Ejército Popular de Liberación (EPL), que continúa expandiendo y sofisticando sus capacidades de aviación naval. Se trata del tercer portaaviones operativo de China, pero el primero diseñado y construido íntegramente en el país.
A diferencia de los portaaviones Liaoning y Shandong, basados en modelos soviéticos y dotados de rampas para el despegue de aeronaves, el Fujian está configurado bajo el sistema CATOBAR, que utiliza catapultas electromagnéticas (EMALS) y cables de frenado. Hasta el momento, el único portaaviones del mundo en contar con este sistema era el Gerald R. Ford de la Marina estadounidense.
Gracias a este salto tecnológico, la aviación naval china podrá incorporar el avión de alerta temprana KJ-600, comparable al E-2D estadounidense, lo que ampliará significativamente el alcance del radar y la capacidad de gestión de combate de los grupos navales. El Fujian también operará versiones para catapulta del caza J-15, aeronaves de guerra electrónica J-15DT, helicópteros antisubmarinos Z-20 y el nuevo caza furtivo embarcado J-35.
El Fujian tiene un desplazamiento estimado de 80.000 toneladas y una eslora de 316 metros. Si bien utiliza propulsión convencional, su tamaño y configuración lo ubican como el buque más avanzado de la Armada china. La entrada en servicio del portaaviones se produjo después de una serie de pruebas en el mar iniciadas en mayo de 2024.
El buque está pensado para expandir el alcance operativo de la Armada del EPL más allá de las aguas cercanas de la denominada “primera cadena de islas”, donde China busca consolidar su hegemonía. El Fujian permitirá operar en la “segunda cadena de islas”, extendiéndose hacia áreas del Pacífico occidental cercanas a bases estadounidenses, tensionando la competencia con Washington por el control del espacio marítimo asiático. Mientras tanto, autoridades chinas han confirmado que ya se está construyendo un cuarto portaaviones, aunque sin dar mayores precisiones.
