Hace unas semanas la fiscalía federal de Frankfurt detuvo a un ciudadano estadounidense, quien fuera exempleado de las fuerzas armadas de los Estados Unidos en el país germano, bajo sospechas de haber intentado obtener información sensible para China.
El detenido fue identificado como Martin D., quien hasta hace poco trabajaba pare el ejército estadounidense en Alemania. En un comunicado la fiscalía indicó que el hombre es sospechoso de haberse declarado a sí mismo dispuesto a ejercer como agente secreto.
Las autoridades alemanas precisaron que el individuo contactó a servicios gubernamentales chinos y les ofreció transmitirles información sensible del ejército estadounidense para que se las entregaran a un servicio de inteligencia chino. El sospechoso habría accedido a la información en cuestión en el marco de sus actividades como militar.
Un juez de turno decidirá sobre la detención provisional de Martin D., a su vez, el gobierno alemán anuncio a principios de octubre que se adoptarán medidas para reforzar los controles de seguridad frente a los riesgos de espionaje y de sabotaje en los ministerios y diferentes reparticiones públicas.
En consonancia, no es el único caso de espionaje detectado en el último tiempo, ya que la oficina de prensa del fiscal general de Alemania anunció el pasado 23 de abril, la detención por presunta actividad de espionaje de tres hombres y una mujer que presuntamente habían estado espiando para China.
Lo mismo habría ocurrido el 18 de abril con la aprehensión de dos hombres que supuestamente planeaban atentados contra objetivos militares alemanes. Ambos detenidos pertenecían a la Republica Popular de Donestsk.
El jefe del servicio de inteligencia nacional de Alemania Thomas Haldenwang (Oficina para la Protección de la Constitución) manifestó: “Las ambiciones globales de China tienen como objetivo ganar mas poder para dar forma a su propia reivindicación de organización y liderazgo, y cabe que conduzcan a una mayor intensificación de las actividades de espionaje.«
China quiere ser la primera potencia política, militar y económica del mundo en 2049. Este objetivo se persigue continuamente: por medios legales, pero también por medios ilegales.
Según Haldenwang, el despliegue de académicos y estudiantes chinos invitados en las universidades alemanas son un punto crítico de riesgo ya que estos son obligados a transmitir información al gobierno chino, por lo que constituyen potenciales herramientas para el espionaje extranjero.
El arresto de Martin D. forma parte de los esfuerzos de Alemania para intensificar la vigilancia ante posibles actividades de espionaje, especialmente vinculadas a China y Rusia. En un contexto de creciente competencia geopolítica y amenazas a la seguridad, Alemania se ha enfocado en desmantelar redes de espionaje extranjeras, dado su papel clave en la infraestructura de defensa de la OTAN.
La cooperación con Estados Unidos ha sido esencial para detectar y neutralizar estas amenazas. Aunque el Ministerio de Justicia alemán no detalló cuánto tiempo Martin D. colaboró con China ni qué compensación recibió, su arresto se suma a otros recientes en Europa relacionados al espionaje.