En una conversación por teléfono de casi una hora, Donald Trump y Vladimir Putin reafirmaron sus posiciones respecto a la guerra en Ucrania. Según declaró a la prensa un asesor del Kremlin, el mandatario norteamericano presionó nuevamente por una salida rápida al conflicto, mientras que el líder ruso reiteró que Moscú no dará marcha atrás en sus objetivos.

“La conversación se centró en la posibilidad de alcanzar una solución negociada”, afirmó Ushakov, quien agregó que Trump manifestó su intención de detener el conflicto “lo antes posible”. No obstante, Putin insistió en que Rusia continuará buscando “la eliminación de las causas fundamentales” que, desde la perspectiva rusa, llevaron al estallido de la guerra: la expansión de la OTAN hacia el Este y el respaldo de Occidente a Kiev.

Si bien el gobierno ruso expresó su disposición a seguir con las conversaciones, Ushakov resaltó que cualquier negociación de paz debe darse exclusivamente entre Moscú y Kiev, dejando fuera a Washington. En esta línea, funcionarios ucranianos informaron que los representantes rusos solicitaron a los diplomáticos estadounidenses que se retiren de la reunión en Estambul celebrada a comienzos de junio.

Además de Ucrania, Trump y Putin discutieron la situación en Irán y Medio Oriente. Aunque no se mencionó la posibilidad de un encuentro cara a cara entre ambos, el Kremlin aseguró que las conversaciones continuarán en el futuro.